Fiscales comienzan investigación de corrupción en Rectorado de la UNA
Durante el día de hoy, los fiscales Cabrera y Aghemo ya tomarían las primeras determinaciones sobre los escandalosos hechos en el Rectorado de la UNA denunciados por dirigentes de la Coordinadora de Abogados del Paraguay (Coapy).
Esa es la información proporcionada ayer, después de que el fiscal general designara a ambos agentes fiscales para investigar una denuncia sobre corrupción en la institución pública de educación superior.
Según la denuncia presentada por la presidenta de la Coordinadora de Abogadas del Paraguay, Kattya González, y la secretaria del gremio, María Esther Roa Correa, en el Rectorado de la UNA se cometieron delitos de lesión de confianza, cobro indebido de honorarios y otros hechos de corrupción que merecen ser investigados.
Los ilícitos se consumaron mediante el pago indebido de millonarias sumas de dinero a la “secretaria vip” Tatiana Cogliolo, quien recibía todo tipo de beneficios gracias al apoyo y protección del rector, dice la denuncia.
Salario millonario
La “secretaria vip” fungía como asistente privada del rector Froilán Peralta, y por ello percibía un salario mensual de G. 12.600.000, dice la denuncia.
“El monto incluía el cobro de bonificaciones, además de estar asignada como profesora de dos cátedras de la Facultad de Veterinaria en la compleja carrera de Producción Animal, teniendo como formación académica el título de maestra parvularia”, expresa la denuncia.
Sigue diciendo que Cogliolo, sin ser profesional de ninguna laya “ya formaba parte del plantel de profesores” de la Facultad de Veterinaria cuando tenía 21 años de edad, e indica que esa afirmación puede corroborarse con planillas y documentos de pagos del Ministerio de Hacienda.
La denuncia menciona como responsables de otros hechos de corrupción en la misma institución a Gladys Ester Cogliolo Sosa, Evelyn Caballero Izquierdo, y Chiara Jorgelina Noemí Izquierdo Sosa, todas funcionarias de la UNA.
Por otro lado, el contralor interino, Roy Rodgers, anunció que se auditarán el Rectorado de la UNA y la Facultad de Veterinaria.